¿y porque?

Nos complicamos los días pensando en que será y sin embargo cuando menos te lo esperas sucede algo que cambia el rumbo de tu camino sin más.

Nos acostumbramos a conseguir todo aquello que queremos, a tener bajo control todo lo que nos rodea y saber manejar las situaciones, muchas veces nos crecemos, pero, nos venimos abajo demasiado rápido cuando no podemos conseguir lo deseado, cuando nos vemos fuera de lugar y sin saber cómo seguir adelante cuando en esta ocasión no está en tus manos la situación.

Cuando esto nos sucede en el trabajo, en los estudios etc., Nos apoyamos en esos amigos o amigas que siempre tenemos alado, esa persona que te ayuda a dar la cara en muchas ocasiones y que si hace falta ya lo hace ella por ti, y estamos salvados… Si, es genial cuando puedes recurrir a ello…

..Pero…

¿Y en los sentimientos? ¿En el amor? ¿En la pareja? ¿A quién recurres?
A nadie, en estas ocasiones estamos solos, no podemos dejar que los demás decidan por nosotros o que piensen por nosotros, porque en los sentimientos nadie es capaz de mandar, ni si quiera uno mismo.